martes, 28 de agosto de 2012

Speedkings


Para quienes habitamos en Madrid y gustamos de esto del rock, resulta difícil hablar sin cierta emoción de Sex Museum. Vivir su evolución sobre un escenario mientras su obra mutaba a medida de que las inquietudes del grupo aumentaban, ser fedatario de su categoría internacional (peligroso telonero para artistas de relumbre mundial) o disfrutar de ese proyecto paralelo, Los Coronas, que ha devenido referencia mundial de la música popular instrumental, ha sido sinónimo de asumir sin complejos ni prejuicios que lo que teníamos ante nuestros ojos (y oídos) era una de la mejores bandas de rock and roll del planeta.

Speedkings (2001), su segundo álbum tras el retorno con Sonic el año anterior —el grupo había pasado cerca de tres en barbecho—, hunde sus fundamentos en el hard de los setenta —como anuncia ese título que es referencia explícita a Deep Purple e implícita a Little Richard— para lograr un trabajo espléndido, el primero como miembro de Sex Museum del exquisito baterista Roberto Lozano, Loza, quien se reconoce alumno nada más y nada menos que de John Bonham, Keith Moon, Mitch Mitchell y Matt Cameron. A lo largo de los once temas que ponen en pie el disco —todos originales excepto la versión del clásico que en plural lo intitula—, la banda demuestra que es posible acercarse a sonidos pretéritos y lograr, sin traicionarlos, un producto fresco que no llore por el pasado sino que celebre el presente. Las guitarras pesadas de Fernando Pardo se vuelven psicodélicas si es necesario en el desarrollo nunca previsible de las canciones; el órgano Hammond y el teclado de Marta Ruiz soportan el lado más alucinógeno y sensorial de las interpretaciones y crean un hermoso manto que —arropando al conjunto— supone buena parte de la personalidad del álbum y de Sex Museum; la percusión del mencionado Loza y el bajo de Pablo Rodas forman una base rítmica dinámica y exacta; y la voz de Miguel Pardo completa un quinteto que no alcanza la perfección sólo porque no existe, ni es deseable que lo haga.

A partir de entonces, y como si no tuviera ya unas sólidas carrera y discografía a sus espaldas, Sex Museum lanzará durante los siguientes diez años un doble CD en vivo y tres discos de estudio (uno de ellos, Fifteen Hits That Never Were, con material antiguo puesto al día), cuya impecabilidad hace que nos preguntemos si no será éste el grupo de rock más importante nacido en España después de Burning. A riesgo de exagerar con una afirmación tan tajante, dejo la cuestión formulada por si alguien está interesado en el debate. Por de pronto, Speedkings sigue lanzando argumentos desde los altavoces.

7 comentarios:

  1. A la pregunta que lanzas al final se podría responder un rotundo SI.

    Sex Museum, qué banda, amigo... La antítesis de lo cutre, el paroxismo de las influencias bien entendidas. Yo los descubrí en plena mocedad con "Fly By Night" y hasta hoy.

    Precisamente, compré el disco que reseñas y el directo el mismo día. Buen cancionero el de "Speedkings", aunque soy de la opinión de que alcanzan todo su potencial cuando son expuestas en vivo (el sonido me parece demasiado denso por momentos, casi Stoner)

    Qué trayectoria, qué saber evolucionar sin traicionarse el de los madrileños, desde que eran un grupo de garage revival a lo Fuzztones hasta hoy... Grandes!

    Rock On!

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  2. Brutales y siempre brutales, los mejores en españa. Y encima con sus grupos paralelos demuestran que estás a años luz de la media y en un universo de r'n'r que ya quisiera yo para mis grupos.

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  3. Veo que estamos muy de acuerdo, Tyla. El "Fly By Night" es también tremendo. En esa época era impresionante ver a Sex M. en directo, el grupo tocaba con dos baterías, y salías noqueado de sus conciertos. Y, sí, qué trayectoria.

    Si, hoy en día nadie hace sombra a Sex M. en España, anónimo. Me dejas con la mosca detrás de la oreja, ¿cuáles serán tus grupos?

    Un abrazo para los dos.

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  4. Precisamente del Fly By Night y relacionado sobre lo que se comentaban de sus influencias, trayectoria y buen hacer, su versión del clásico de los ACDC "Whole Lotta Rosie" pasado por el tamiz Deep Purple en ese directo me parece que es un tema que más de uno y de dos debieran escuchar.
    Un abrazo.
    Pachi
    p.d. ya te lo comenté en privado, pero va en público: ¡enhorabuena por tu nueva novela!

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  5. Es una versión excelente, cierto, Pachi. Bueno, muchos grupos tendrían que escuchar a Sex Museum en directo para aprender. Muchas gracias por lo de la novela.

    Un abrazo.

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  6. Pufff amigo Gonzalo, tu lo sabes porque lo hemos hablado, Sex Museum es el mejor jodido grupo que ha parido este puto pais (estilo Tarantino).

    Discho esto, querido amigo, Speedkings es un disco soberbio, aunque coincido con Tyla en que a veces el sonido es pesado, pero va acorde con el sentido del álbum.
    Ahora, si he de elegir los mejores de este grupo, a mi Sonic, justo el anterior me parece brutal, con escarceos con la música electrónica. Además el United de 2006 (comentado en mi espacio) y el último Again and again son de volverse loco.

    Esos si, si hay alguien que todavía no los ha visto en vivo, no sabe lo que se pierde.

    Además el primer grupo que un servidor entrevistó con Fernando y Marta muy gentiles y enrollados.

    Un abrazo.

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  7. Todos los discos que citas, Savoy, son buenísimos. Como dices, el que no ha visto a los hermanos Pardo y compañía en directo tiene una asignatura pendiente. Lo bueno de Sex Museum es que se le puede ver en pequeños clubs, y eso es una suerte sin igual. Sí, recuerdo la entrevista en tu blog.

    Un abrazo.

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